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"Antonio José de Sucre: Estratega clave en las victorias de Junín y Ayacucho, que sellaron la independencia de América del Sur."
El evento contó con la presencia del ministro del Poder Popular para la Cultura, Ernesto Villegas, quien subrayó que esta producción es un aporte de las artes escénicas venezolanas a la conmemoración del bicentenario de estas batallas cruciales para la independencia de América Latina. "Agradecemos a todos los que han contribuido a nuestra conciencia histórica y a nuestro compromiso latinoamericanista, porque para nosotros, la Patria es América", afirmó.
Villegas destacó que en el país se celebra la Batalla de Ayacucho como si hubiera ocurrido en tierras venezolanas. "Fue en suelo bolivariano donde nuestros antepasados expulsaron al último soldado español que pisó el sagrado suelo de nuestra Patria Grande", expresó.
Esta puesta en escena, basada en la obra de Néstor Caballero y dirigida por Carlos Arroyo, resaltó la valentía y humanidad de Sucre en la lucha por la libertad en América del Sur. "Al pensar en Sucre, a menudo lo imaginamos como un prócer anciano, pero falleció a los 35 años. Su gesta histórica se desarrolló entre los 17 y 27 años, una década de intensa juventud. Esto puede servir como una referencia significativa para los jóvenes venezolanos en su búsqueda de un pensamiento libertario que ha caracterizado la historia de liberación del Sur", explicó Arroyo.
El director detalló que tomó como base la escena “La Pesadilla” del segundo acto de la obra de Caballero, lo que le permitió integrar diversos elementos performáticos, creando un espectáculo que combina fuego, danza, teatro y circo.
"El objetivo es que este espectáculo refleje la importante participación del pueblo venezolano en la liberación del Sur y que los jóvenes tomen conciencia de ello. La idea es presentar a Sucre no como un prócer de bronce, sino como un joven venezolano que triunfó en la Batalla de Ayacucho, contribuyendo también a la formación de Bolivia, en reconocimiento a Simón Bolívar", destacó.
Arroyo también resaltó el fuego
como un elemento esencial en la creación artística en el teatro. "El fuego
simboliza pasión, vida, calor y seguridad. En el teatro, se relaciona con
'Prometeo encadenado' y la sabiduría que se transfiere del divino al pueblo. Es
un símbolo de transferencia de conocimiento y desarrollo", añadió.
El director expresó su satisfacción por el proceso creativo que ha llevado a cabo con su equipo. Comentó que su enfoque en la dirección de este espectáculo se centra en el uso de espacios amplios, brindando al espectador una experiencia lúdica que resalta la diversidad de los elementos artísticos.
La realización de "Toñito" fue un esfuerzo conjunto. Julia Carolina Ojeda, encargada de la música y dramaturgia, explicó que se trabajó con una fórmula que surgió de la propuesta del director junto a los actores y todo el equipo, buscando una propuesta orgánica.
Ojeda destacó que el mayor desafío técnico fue el manejo del espacio y las distancias entre los actores en el escenario, un reto que se superó gracias a la profesionalidad del elenco y del equipo de producción.
Carmen Ortiz, responsable de la coreografía, mencionó que la obra también rinde homenaje a la cantante María Rodríguez, "La sirena de Cumaná", y al oriente venezolano. Resaltó que el espectáculo tiene un alto requerimiento escénico, cumplido gracias al compromiso de los actores y a la dirección efectiva. "Ha sido un gran avance en mi carrera poner en práctica todo esto y estoy satisfecha con el resultado. Los actores y actrices han demostrado un gran nivel, pudiendo actuar, bailar, hacer malabares e integrar múltiples elementos", afirmó.
Ortiz también resaltó que trabajar con Carlos Arroyo ha sido un proceso enriquecedor, dado que es un director que crea en el momento. "Ha sido un trabajo de construcción continua, y es la primera vez que colaboro así con un director. He tenido libertad para proponer y crear, lo que ha sido muy gratificante. El público debe asistir a 'Toñito' para disfrutar de un espectáculo de alta calidad de la Compañía Nacional de Teatro", concluyó.
En relación a los elementos circenses, Nicky García, director de la Fundación Circo Nacional de Venezuela, indicó que su contribución al espectáculo incluye la incorporación de estructuras aéreas y el manejo del fuego por parte de los actores, quienes recibieron formación específica para su uso seguro.
García expresó su orgullo por
rendir homenaje a Antonio José de Sucre, un joven que logró mucho antes de los
30 años. "Es importante recordar a estos referentes a través de lenguajes
contemporáneos. Lo interesante es contar con un elenco mayormente juvenil, ya
que Sucre merece que los jóvenes de su país le rindan homenaje", afirmó.
Gerónimo Reyes, encargado de la iluminación, mencionó que uno de los mayores retos del montaje fue el uso seguro del fuego como elemento artístico, asegurando todas las medidas de seguridad necesarias. "Mi aporte es maximizar la presencia segura del fuego en el escenario y dar carácter a los personajes espectrales, contribuyendo así al desarrollo de la puesta en escena", comentó.
Desde su estreno el 21 de agosto, "Toñito" ha a 2,000 espectadores al Nuevo Circo de Caracas. Este espectáculo de la Compañía Nacional de Teatro (CNT) celebra el heroísmo de Antonio José de Sucre en las batallas de Junín y Ayacucho.
Más de 30 artistas interpretan la
escena de la pesadilla del texto de Caballero, mostrando las alucinaciones de
"El Abel de América". El elenco incluye a Dora Farías, Livia Méndez,
Jesús Plaza, Omar Churión, entre otros, junto a Yonel Rivas como actor
invitado. También cuenta con el Grupo Estable Canto Lírico Estudio, liderado
por la maestra María Elena Vargas, quienes aportan sus voces al viaje onírico
de Sucre.
